Ellos procuran no matar ni el más pequeño insecto y para ello barren muy bien los lugares que por donde van a caminar para no matarlos con su pisada. Otros jainas se cubren la boca con una tela para que no penetre insecto alguno cuando estan hablando.
Recuerdo hace unos años atrás cuando se hablaba de Yoga y de chakras la gente respondía con aire de incredulidad, hoy no sucede así, los chakras no son perceptibles pero los hinduístas tenían conocimiento de ellos. Que son unas ruedas situadas a través de la columna vertebral en las zonas donde se encuentran los grandes órganos o sistema glandular. Ahora estos chakras nos son familiares y sabemos que a traés de ellos recibimos y transmitimos señales y emociones a largas y cortas distancias. Son centros receptores y transmisores de pensamientos y acciones.
Los jainas dicen que cuando una persona tiene deudas kármicas, es carnicero o mata animales tiene en su aura, en su campo aural, en su campo magnético corporal que rodea a las personas, unas manchas negras y que a pesar de no ser perceptible al ojo humano son señales del mundo sutil que indican el comportamiento de la persona. Si matas a un semejante o te lo comes, recuerden que somos animales, nuestra vibaración a nivel cósmico bajará haciendo que vivamos en una atmósfera pesada, densa.
Ellos no comparten la ingestión de carne además de que no visten ni calzan artículos de origen animal para conservarse puros en cuerpo y alma, libres del sufrimiento de la criatura sacrificada para esos fines.
Y dijo Gandhi: "La grandeza de una nación depende la forma en que traten a los animales".
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